Nunca pensé que me iba a enfrentar a éste "problema" a mi corta edad, yo siempre juré y perjuré que sería una madre comprensiva, que no cometería los mismos "errores" que vi en otras personas, que cuando yo estuviera en tal o cual situación reaccionaría diferente... y qué creen? que no fue así! caí en el mismo patrón de mis bisabuelas!
Julieta, mi hija, me hace sentir la más orgullosa de las madres, la admiro por todo lo que es y lo que hemos logrado juntas, es un niña educada y coqueta... cariñosa a decir no más y obediente como ella sola. Es un perrita schnauzer de casi tres años de vida, mismo tiempo que con su ternura y cariño, me ha enseñado a amarla con todo el corazón!
Hace más de un año decidí que era tiempo de que Julieta fuera mamá. Empecé con los plenes, tenía que encontrarle al especímen correcto y esperar el próximo celo con ansias para consumar mi hazaña (imagínense que mi mamá hiciera eso conmigo!) Para Junio del año pasado Margarito había llegado a nuestras vidas... Con el año nuevo el momento ideal apareció, debo admitirlo... no pude con eso y un fin que me fui a Toluca, mi hermanó se encargó de llevar a Julieta a su "cita de amor" yo sólo hablaba desesperada preguntando si "la niña" ya estaba de regreso en casa. El lunes siguiente regresé y corrí a verla, sus ojos tenían una luz que nunca había percibido en ella y adivinen? estaba embarazada! cuando comenzó a crecerle su pancita lo confirmé y 2 meses después llegaron mis 5 cachorritos, fui la más feliz, creo que incluso, más que Julieta.
Hoy en la tarde llegué a casa y mi mamá estaba literalmente deshecha... juro que imaginé lo peor, mil ideas pasaron por mi cabeza y temía escuchar que había pasado algo muy grave... me asuté! Además de Julieta, tenemos un chihuahueño negro, Fermín y a muñe, la única niña que le sobrevivió a Julieta. Resulta que los hermanos que se deberían querer como hermanos y verse como hermanos y tratarse como hermanos... "le pusieron Jorge al niño" Julieta y Fermín se cruzaron. El le traía ganas desde hace rato, Carlitos siempre me decía: "él no ve a Julieta como su hermanita" yo siempre confié en ellos.
Lloré, me enojé y regañé... hice exactamente lo mismo que siempre "critqué" Tal vez estoy exagerando, finalmente ellos son animales y no pasa de que en 2 meses nazcan perritos fenómenos, le ruego a Dios, a la Virgen María y a todos los Santos que su cuerpo los rechace y que todos sigamos felices y contentos, la verdad es que con su primer parto, no la pasamos nada bien, de entrada se nos murieron 2 cachorritos y Julieta se enfermó horriblemente, creo no estábamos preparados para un nuevo embarazo. De hecho, la decisión estaba tomada: esa había sido su primera y última camada. Pero ahora mi hija me da la sorpresa... y me siento decepcionada. Como me dijo Carlos, ellos sólo respondieron a sus instintos, lo sé y lo comprendo pero se siente tan feo... defraudada es la palabra.
Mi mamá siempre me ha dicho: "vamos a ver si es cierto cuando tengas a tus hijos" y hoy pude comprobar que entre el dicho al hecho hay mucho trecho... acabo de dar una clase de "inteligencia emocional" y qué creen? cero aplicado a mi vida. A estas alturas de la existencia le hice la ley de hielo a Julieta y Fermín pronto se irá de la casa...
Julieta está deshecha, me ve con ojos temblorosos mientras yo la ignoro, es la primera vez que no le doy su besito de las buenas noches y me duele mucho... Una madre no se aleja, una madre por más decepcionada que se sienta está a un lado de sus hijos, una madre... qué palabra tan grande, qué privilegio tan grande, qué bendición tan grande!
Le ruego a Dios que cuando me regale un hijo, sea lo suficientemente madura, serena, amorosa, comprensiva, paciente... y así poder acercarme a lo que tanto anhelo ser para ellos, todo lo contrario a quien soy esta noche.